lunes, 16 de septiembre de 2013

Para Estherlitzia y Pepón ...


Quiero expresar mis deseos en forma de versos,
Unos versos que algún día espero que suenen en algún rincón de vuestra casa

tranquila  le miro
mientras él
ajeno al mundo,
enreda en  el suyo propio,
es en ese preciso instante,
es cuando  su luz
una vez más
acaricia todo mi ser.
Y entonces,
cerrando  los ojos,
dejo el café en silencio,
y cruzando los dedos
recuerdo aquel día,
aquella tarde de verano,
en la que todo él
fue sembrado en el lugar más profundo,
sentimientos
que yo desconocía
y que aún hoy
no llego,
ni quiero,
llegar a comprender.

No voy a permitir que las quejas cotidianas,
diluyan este precioso momento.

Abro los ojos,
y le miro,
dibujando esa mueca sería tan suya
ese brillar de ojos
Y me doy cuenta
de lo que realmente veo
su sonrisa y los ojos que deseo

Y sucede,
aunque sea difícil de creer,
sucede,
que le quiero,
le amo más
que en aquel primer amanecer.

martes, 10 de septiembre de 2013

Agostados

Murmullos de tragedia flotan en sus miradas,

enfocan hacia ninguna parte,

adornadas con la mueca del que ha sido vencido,

malas nuevas que liman  esperanzas,

verdes apagados anclados en sus córneas.

¿Còmo combatir a un enemigo invisible?

"sistema"  ó "entidad"  imaginarias ,

mientras hunden su cabeza en su propio mar de lágrimas.

¿Cómo luchar en este paisaje de hombres  vacíos de valores?

Un último fósforo arde para vislumbrar apenas el suelo  que pisan.

Dioses abandonados,


astros olvidados ven como sus hijos agonizan en la saliva de la mentira,

indigestión crónica que padecen desde que negaron su libertad.

jueves, 5 de septiembre de 2013

Negro a Gris


Me encanta este sitio,
eso sucede cuando tomo las riendas de mi caballo,
de pelo negro brillante, ojos profundos y cascos de piedra.
Cuando eso sucede,
la prensa es cómic,
mis males huyen 
y se me curvan los labios.
La dureza del diamante torna en carne,
músculo de breva,
y la cerveza no sabe amarga.
Vivo en un planeta llamado Negro,
allí cultivo y siego,
recojo penas,
mientras respiro agujas.
Sé que al final del día me reuniré con ellos,
sé que mañana será otro día,
fresco y gris,
de aroma a café y sonido a leña.
De mis flaquezas salgo,
para volver a ellas,
pero no hoy, 
quizás mañana.