martes, 4 de febrero de 2020

empiezo a notar el otoño, desde hace días,
languidecer mientras endurece el cuerpo y el alma...
luchar contra el apagón que se cierne
o dejarse apagar por tantos días encima
se me olvidó llorar y volví a bajar
y lloro , con María Coma, en la mesa
muchas ganas de llorar y no saber hacerlo
y seguir con ese nudo en la garganta
tan maravilloso y extraño todo
tan triste y tan necesario
hoy , en breve, las mañanitas por teléfono...
45 palos de vida devorada
y vigilando la reserva



2 comentarios:

  1. Te acompaño las mañanitas en fa# mayor para que se vayan disipando esas sombras que te embargan, querido amigo. Qué gusto oír de nuevo tu rima

    ResponderEliminar
  2. Si, hermano... Me gusta oír como te sientes... Un poco, lo siento igual

    ResponderEliminar